CINE CLUB 27 AÑOS
CINE CLUB 27 AÑOS
Por: Manuel E. Martínez R.
Coordinador
“El órgano con el cual yo he comprendido el mundo es el ojo”
J. Goethe
El nuevo rol que nos impone el lenguaje audiovisual
en la actualidad, es el de convertirnos no en simples espectadores frente a las pantallas de cine, sino en el de “lecto espectadores”, como lo propone con acierto Vicente Luis Mora
A la amable teleaudiencia que domingo a domingo a partir de las 10 de la noche, sigue este espacio cultural por el canal universitario TELEPASTO UNA MIRADA SUR, nos complace manifestarle que este viernes 15 de marzo de 2024 estaremos cumpliendo veintisiete años de emisión casi continúa.
Cabe recordar que CINE CLUB fue uno de los primeros programas en conformar la respectiva parrilla cuando en 1997, entraría a funcionar también la dependencia conocida como Unidad de Televisión adscrita a rectoría, durante la administración del Dr. Pedro Vicente Obando O.
En ese recorrido y en cumplimiento de la Misión del programa que, “Pretende llevar a la teleaudiencia pastusa aquellas producciones del Séptimo Arte que se han destacado por su belleza estética y su temática en los diferentes géneros que se tienen en la actualidad”, se puede señalar que se ha alcanzado ese propósito si se tiene como referente la variedad de títulos, directores, géneros y nacionalidad de las producciones.
De igual manera, y haciendo eco a la Visión de este espacio formulada en los términos de “lograr esa labor de acercamiento y difusión de lo mejor del Séptimo Arte Latinoamericano y del Mundo”, a partir de un trabajo previo de selección de las películas para después programarlas en Ciclos Temáticos, el balance no puede ser más que satisfactorio.
Así y en una rápida selección de las películas presentadas, se puede evocar esas producciones del cine latinoamericano y en particular la cinta con la cual se inauguraría Cine Club, como fue “El lado oscuro del corazón” (1992) del realizador gaucho Eliseo Subiela que contó no sólo con una bellísima historia poética donde irrumpía el amor y el erotismo, sino también con una destacada banda sonora a cargo del compositor Oswaldo Montes.
Le seguirían otros filmes como el “Olor de la papaya verde” (1993) del realizador vietnamita Anh Hung Tran, merecedora de la Cámara de Oro en el festival de Cannes de ese año, que mostraba “la situación de la mujer en el Vietnam de mitad de siglo XX, así como también la lucha de una niña del campo, la protagonista, por sobrevivir en la ciudad”.
Por supuesto que el cine colombiano también formó parte de la cartelera semanal y fue así como se emitió la película “Edipo alcalde” (1996) de Jorge Alí Triana, una coproducción de Colombia, Méjico y España que significó la aspiración del nobel Gabriel García Márquez de adaptar la conocida tragedia de Sófocles, pero al contexto colombiano, y fue así como escribió el guion acompañado de Stella Malagón y Orlando Senna.
Para concluir esta breve memoria de Cine Club, cabe relievar la otra impronta de este espacio cual es la de formar públicos con criterio frente a ese mundo inacabado del Séptimo Arte abigarrado y variopinto que se ofrece ya no sólo en las salas comerciales sino a través de las plataformas como Streaming.
A PROPÓSITO DE UN AÑO MÁS DE VIDA DE CINE CLUB
Por: Mauricio Verdugo Ponce
27 años al aire, más de un millar de películas emitidas, una travesía por las más
diversos géneros, temáticas, épocas, cinematografías, directores y actores. Desde
películas de culto hasta films de entretenimiento, pasando por el cine independiente,
el cin e de autor y el cine alternativo. Un amplísimo espectro de manifestaciones del
séptimo arte concebido como una atractiva oferta para el público local. A través del
medio televisivo, nos hemos empeñado en familiarizar a los televidentes con
opciones que abr en un amplio horizonte más allá de las producciones adocenadas
del cine de consumo, con la intención de que encuentren en el cine no sólo una
posibilidad de distracción, sino y sobre todo, de adoptar una mirada crítica frente a
la realidad o una actitud reflexiva de cara a los grandes temas que atañen a las
sociedades y a la misma naturaleza humana.
Mi compromiso como colaborador del espacio televisivo Cine Club inició pocos
meses después de que Manuel Martínez y un puñado de cinéfilos se entregaran a
la tare a de abrir un espacio en el entonces nuevo canal universitario para compartir
su pasión por el cine y contribuir a la formación de públicos. Desde entonces, en
estrecha colaboración con el profesor Manuel , hemos mantenido este espacio
semanal de manera casi ininterrumpida, en un esfuerzo por llevar a la comunidad
local producciones fílmicas que, en su mayoría, no suelen exhibirse en las salas ni
emitirse por los canales de televisión comerciales. Un esfuerzo sostenido que ha
situado a Cine Club en un favorable rating de sintonía. No ha sido un camino libre
de escollos, pero nos queda la satisfacción de ser el único espacio dedicado al cine
que, en la televisión local , se ha mantenido por tanto tiempo , gracias al interés de
quienes a lo largo de estos años han estado al frente de Telepasto y a la fidelidad
de la audiencia. Todos ellos han sido el aliciente que nos impulsa, tras 27 años, a seguir al aire.
Durante más de dos décadas y media, hemos seguido con expectativa el auge del
movimiento cineclubístico en nuestra ciudad y un incremento del público que asiste
a las funciones. Estamos convencidos que el medio televisivo constituye un vehículo
ideal para propaga r el interés por el cine y contribuir, de esta manera, a esos
esfuerzos, antes insulares y hoy canalizados por iniciativas como la Red local de Cineclubes.
Quedan episodios anecdóticos, buenos momentos, pero, sobre todo, la satisfacción
de que ese proyecto que nació hace 27 años y que, quizá, no se proyectaba sino a
unos pocos años, sigue vivo, ha madurado y seguimos cosechado sus frutos.
Gracias a la tenacidad del profesor Manuel Martínez y de quienes han creído en la
posibilidad de que el cine, y el arte en general, puede cambiar vidas, seguiremos
con el mismo empeño y entusiasmo en esta labor de divulgación del séptimo arte.